Las invenciones pueden llevar una vida difícil. Incluso aquellas que terminan siendo revolucionarias. Cuando el iPhone salió al mercado, Steve Ballmer, director ejecutivo de Microsoft entonces, dijo: "No hay ninguna posibilidad de que el iPhone obtenga una cuota de mercado significativa". Un escritor de Bloomberg lo llamó una "baratija de lujo que atraerá a algunos frikis de los dispositivos". La historia ha demostrado lo contrario.
En tecnología empresarial, es habitual encontrar un escepticismo similar ante cualquier cosa nueva, y por una buena razón. Es todo un desafío separar el grano de la paja en un mercado ruidoso y lleno de gente. Las innovaciones se dispersan y se adoptan de manera irregular. Y la gente encuentra consuelo en lo que ya conoce y se le da bien. La mayoría de las organizaciones mantienen una actitud de esperar y observar cuando se plantean adoptar la tecnología, mientras que otras se toman muy en serio la adopción rápida de nuevas herramientas y soluciones. ¿Cómo se decide?
Reflexionando sobre mi experiencia como líder de tecnología en Synchrony Financial y GE, e inspirado por las recientes charlas que he tenido con Zscaler y sus directores de experiencia REvolucionarios, he reunido algunas ideas que pueden ayudar a responder a la pregunta anterior. A continuación figuran factores críticos de éxito para la implementación de nuevas tecnologías, la creación de grandes equipos y la entrega de proyectos de TI.
Superar la inercia
Proyectos como el traslado de cargas de trabajo a la nube, la racionalización de pilas tecnológicas dispersas y la adopción de la confianza cero implican superar la inercia. Las inversiones preexistentes en infraestructura local, como servidores proxy y concentradores VPN, son un buen ejemplo de inercia. Es fácil decidir que es demasiado tarde para implantar una nueva solución y seguir sustituyendo la infraestructura por otra igual, prolongando el tiempo que pasará en el viejo mundo durante otros tres años. Sin embargo, situaciones como la pandemia y acontecimientos como una fusión o una adquisición pueden exigir que se actúe porque se necesitan nuevas soluciones. No sea víctima de la inercia, adelántese a ella y proporcione la infraestructura que permita a la empresa alcanzar sus objetivos en lugar de darle simplemente lo que necesita para sobrevivir.
Cuando el mundo se puso en confinamiento y los trabajadores se fueron a casa a trabajar, era evidente que la única manera de soportar el tremendo cambio de tráfico de las redes corporativas era recurrir a la nube. La idea es precisamente que la nube es adaptable y flexible, de ahí que se haya disparado el uso de herramientas como Zoom, Microsoft 365 y otras muchas.
Educación y mejora de la formación
Incluso si la implementación de nuevas tecnologías es una apuesta segura desde el punto de vista del valor empresarial, la única manera de que ese valor se haga realidad depende de su personal, su formación continua y su predisposición a las novedades. Los empleados de tecnología en el mundo actual deben estar ansiosos por adoptar o entender lo que se presenta en el horizonte tecnológico. Deberían ser los pioneros y los defensores de la nueva tecnología.
Si a su equipo de ingenieros de red le gusta la red corporativa que ya tenían antes con los mismos servidores proxy, el mismo conjunto de equipos y dispositivos, junto con toda la administración y gestión que todo ello conlleva, entonces tendrá dificultades para ayudar a la empresa a triunfar en el nuevo mundo. La situación previa debe desaparecer, se deben adoptar nuevas herramientas y técnicas.
Como líder, necesita liderar con el ejemplo. Demuestre la capacidad de aprender, cambiar y crecer. Fui director de tecnología durante décadas y una de las razones de mi éxito fue que aprendí y me adapté constantemente a las necesidades cambiantes del negocio y del mercado, y adecué esas necesidades cambiantes a las capacidades cambiantes de la tecnología. La tecnología está cambiando a una rapidez exponencial, por lo que si va a hacer que su carrera dependa de ella, tiene que ponerse en marcha para aprender y adaptarse. Como líder, contrate en consecuencia.
La confianza cero es una pieza de su rompecabezas
Una vez que cuente con un equipo dinámico y diverso con predilección por el aprendizaje continuo, estará preparado para adoptar enfoques nuevos y modernos para resolver sus retos empresariales. Cuando lideré la iniciativa en la nube en Synchrony, enmarcamos el caso de negocio como una capa de una visión tecnológica más amplia que se adaptó para cumplir con los objetivos de nuestra empresa.
Partiendo de la visión general, esbozamos las capacidades técnicas subyacentes que debían ofrecerse para alcanzar esa visión. Nuestra visión empresarial siempre se centró en decidir cómo ofrecer nuevos productos y servicios rápidamente a nuestros clientes.
La rapidez es algo que las empresas exigen. Hay altas expectativas para la implementación rápida de nuevas características y funcionalidades. Conseguirlo significa que las aplicaciones con arquitectura de nube sean ágiles y capaces de aprovechar los diferentes recursos de Internet. Construimos nuestras expectativas sobre la base de la nube, un lago de datos y las API y los microservicios que conllevan una metodología centrada en la nube.
Por supuesto, para tener éxito, necesita que su nube sea segura. Ahí es donde entra la confianza cero. Recurrimos a la confianza cero como un componente clave en la gestión de la red en un mundo en el que el futuro se encuentra en las nubes. Comprendimos el papel de una filosofía de confianza cero para ofrecer una red segura a prueba de los retos del futuro. Rediseñar una arquitectura de confianza cero se puede hacer rápidamente. En nuestro vertiginoso mundo, los proyectos tecnológicos se pueden presentar como una visión a largo plazo, pero en la realidad se dividen en piezas más pequeñas y se replantean en entregables trimestrales. Esto puede ayudarle a seguir siendo ágil, a reducir el riesgo y a controlar las tendencias y oportunidades que puede tener en cuenta en futuros planes trimestrales.
Conclusión
Los CIO, CTO y CISO existen por el bien de la empresa y deben trabajar juntos para que sus empresas tengan éxito. Su verdadero valor es, en última instancia, el de facilitador del negocio y entender cómo hacerlo requiere no solo conocimientos técnicos y empresariales, sino cualidades como el compromiso y la empatía. El uso de las herramientas para superar la inercia, crear el equipo y la cultura adecuados, y comunicar una visión tecnológica convincente para el futuro le harán estar un paso más cerca de ser un verdadero facilitador e innovador de negocio.
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Autor: Greg Simpson director de tecnología (jubilado)
